Detectar con anticipación cualquier irregularidad en materia de salud siempre va a favorecer el tratamiento, este hecho cobra especial protagonismo cuando hablamos de la visión del ser humano.
Según la Asociación Americana de Optometría, toda persona debe realizarse un examen de la vista una vez al año. A partir de los 40 años de edad aumenta el riesgo de enfermedades, por lo que se recomienda especialmente un examen al llegar a esta edad.
Es importante que a los niños les realicen exámenes a los seis meses, a los tres años y cuando vayan a comenzar el primer grado escolar; de esta forma se puede confirmar que su visión está desarrollándose con normalidad.